En Euskadi se concedieron 3.866 licencias de obra mayor durante el año pasado

En Euskadi se concedieron 3.866 licencias de obra mayor en 2024, lo que supone una caída del 0,4% (17 licencias menos) respecto a las concedidas en el año precedente. De esa cifra, 3,456 fueron para rehabilitar pisos ya existentes mientras que sólo 346 fueron para edificaciones nuevas. Ese es uno de los principales datos que ha presentado el Observatorio de la Vivienda del Gobierno vasco en su informe sobre la «Estadística de la edificación», correspondiente al año pasado.
El informe constata que, desde la crisis del sector de la construcción en 2007, se constata un cambio radical en la tipología de las licencias de obra mayor concedidas: se reducen las licencias de nueva planta a favor de una participación creciente de las obras de rehabilitación. De hecho, en Álava, las licencias de nueva planta caen más del 10% respecto a las concedidas hace un año (-11,1%) y las licencias de obras destinadas a la rehabilitación pierden tres puntos en el último año (-3,0%). En Bizkaia, la nueva planta pierde casi siete puntos respecto a las licencias de hace doce meses (-6,7%), mientras que las licencias de rehabilitación crecen un 4,6%. Por último, en Gipuzkoa las de nueva planta caen un 14,7% y las de rehabilitación caen un 4,2%.
Entre licencias de obra mayor (excluidas las de demolición), el crecimiento observado de las destinadas a uso no residencial (8,8%) prácticamente compensa la caída de las de uso residencial2 (-4,4%).
Viviendas previstas
El estudio también apunta la importante caída, en 2024, del número de viviendas afectadas por las licencias de obra mayor concedidas: descienden una de cada diez de las destinadas a rehabilitar y casi un tercio de las de nueva edificación. Concretamente , se contabilizan 5.118 viviendas asociadas a las licencias de obra mayor concedidas. Son casi dos mil viviendas menos que las consignadas en 2023 (-27,7%, en términos relativos) rompiendo, de esta forma, la perspectiva de recuperación de la actividad observada hace doce meses.
En el caso de Álava, las viviendas asociadas a licencias de nueva planta pierden un 23,1% entre 2023 (1.305 viviendas) y 2024 (1.004 viviendas); mientras que las viviendas destinadas a rehabilitación pierden 30 unidades (-18,8%) en este intervalo: pasan de 293 viviendas en 2023 a 238 viviendas en 2024.
En el territorio de Bizkaia, se pierden una de cada tres viviendas de nueva planta, mientras que la caída de las de rehabilitación es la menos intensa de los tres territorios. En efecto, las viviendas asociadas a la nueva planta caen un 32,3% (de 2.778 viviendas en 2023 pasan a ser 1.882 en 2024) y las asociadas a la rehabilitación caen un 7,4% (pasan de 517 a 479 viviendas).
Por su parte, en el último año, Gipuzkoa es el territorio con mayor caída entre las viviendas nuevas y pierde casi una de cada diez entre las de rehabilitación. Las viviendas de nueva planta en el territorio son un 36,9% menos que en 2023 superando sus 1.060 viviendas únicamente el dato de 2020 (949 viviendas) en los últimos 9 años. Las viviendas para rehabilitar pasan de 501 en 2023 a 455 en 2024 (-9,2%).