Dicha pasarela conecta el Paseo de Zubiaurre con el Paseo de Txaparrene, y consiste en dos arcos de hormigón armado sobre las que se apoya la losa del tablero, también de hormigón armado. En la actualidad estos arcos se encuentran muy deteriorados por la corrosión de las armaduras, lo que ha provocado el desprendimiento del recubrimiento de hormigón y la pérdida de la sección resistente.