El soterramiento del paso a nivel de Urduliz estará listo a finales de 2016

Soterramiento-UrdulizEuskal Trenbide Sarea (ETS), ha anunciado que, conforme van desarrollándose las obras, el soterramiento del metro en Urduliz estará finalizado para finales del próximo año.
La obra, ejecutada por ETS y el Consorcio de Transportes de Bizkaia (CTB), cuenta con la financiación del Gobierno vasco y la Diputación Foral de Bizkaia, que aportan a partes iguales los 21 millones de euros que costará el soterramiento, a través del CTB. Precisamente, el viceconsejero de Transportes del Ejecutivo autónomo, Antonio Aiz; el diputado foral de Transportes, Vicente Reyes; el director general de ETS, José Luis Sabas; el director gerente del CTB, Manu Tejada; y el alcalde de Urduliz, Javier Bilbao, entre otros, han recorrido esta mañana el tajo para comprobar in situ el desarrollo de los trabajos.
Las actuaciones se desarrollan a lo largo de 700 m, de los cuales 543 m quedarán cubiertos. La nueva traza, que aprovecha el recorrido de la anterior, tendrá una pendiente máxima del 2,7%. En el centro del tramo soterrado se ubicará la nueva estación de Urduliz, a la altura de donde se encuentra la actual. Las nuevas instalaciones contarán con un andén central de 90 metros de longitud y con los cuartos técnicos necesarios. El acceso al vestíbulo de la estación se realizará desde un fosterito tipo ‘Sarriko’ ubicado en superficie al suroeste de la antigua terminal. También contará con un amplio ascensor con capacidad para 13 personas.
Actualmente se están llevando a cabo los trabajos de excavación de tierras y contención de suelos necesarios para la formación del cajón que albergará la futura infraestructura. Debido a las características de los terrenos a excavar y a la presencia de viviendas en las inmediaciones de la traza ferroviaria, se ha puesto un gran énfasis en los sistemas de contención de tierras a utilizar.
Entre la maquinaria empleada destaca la utilización desde ayer de una hidrofresa para la construcción de los muros más cercanos a las viviendas, con el objetivo de reducir las molestias a los vecinos y garantizar la estabilidad de las estructuras.
La primera parte de la obra se ha dedicado al desmantelamiento de la vía y catenaria, así como al desvío de servicios como red eléctrica, telefonía y agua, entre otros, que han supuesto un importante esfuerzo por la cantidad de servicios afectados.
Vicente Reyes ha manifestado que “la apuesta por el transporte público en Vizcaya es un importante elemento de cohesión territorial”. “De ahí, la satisfacción por haber podido comprobar que la obra avanza y que si no surgen contratiempos podrá finalizar en el plazo previsto, para finales de 2016”.

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